El pasado jueves la CICIG y el MP destaparon un nuevo caso de corrupción, el cual reavivó la indignación de muchos ciudadanos guatemaltecos. Hasta el momento, son 27 personas capturadas por el caso “Cooptación del Estado”, de las cuales figuran personas allegadas a medios de comunicación, bancos, empresas, servidores públicos y partidos políticos.
Entre los implicados destaca Ángel González, empresario mexicano y propietario de los canales 3,7, 11 y 13. González proporcionó hasta Q17,679,200 en fondos provenientes de Radiotelevisión Guatemala S.A., (Canal 3) y Televisiete S.A para el financiamiento de la campaña electoral del Partido Patriota. Ya en el poder, con la intención de devolverle el favor a González, el Partido Patriota, emitió contratos de pauta publicitaria por Q216.26 millones a las televisoras de Ángel González.
Al “ángel de la democracia” le han cortado las alas y la verdad acerca de sus medios de comunicación, los cuales se han encargado de manipular y censurar la información al pueblo, han salido a la luz. Considero que las empresas que se anuncian en esos medios, por el bien de la misma, deben retirar la publicidad; además, los periodistas de las televisoras de González deben asumir la responsabilidad de haber sido partícipes de la censura.
Faltan muchos delincuentes por ser capturados y esperamos que todo aquel que esté involucrado en actos de corrupción, sea procesado. Sin duda, hay muchas personas que no concilian el sueño. No solo el gabinete de Pérez Molina tiembla, todos los corruptos también tiemblan porque pronto les llegará la justicia. Mientras tanto seguirán disfrutando de sus helicópteros, carros, motocicletas, lanchas, terrenos, casas y fincas.
A diferencia de aquellos que ven la soberanía nacional como algo sagrado, considero que es necesario reconocer el gran trabajo que la CICIG ha realizado, ya que han actuado de manera más íntegra que el mismo estado nacional. Es importante exigir que los procesos se lleven a cabo de la manera correcta, siguiendo el debido proceso, para que así se haga justicia real y no solo se trate de calmar el hambre de venganza del pueblo. A pesar del buen desempeño que ha tenido la CICIG, debemos entender que la ayuda no puede ser eterna. Pronto llegará el momento de caminar solos y para eso debemos fortalecer nuestro sistema de justicia.
Recientemente, Thelma Aldana, solicitó al Ministerio de Finanzas Q1,791,710,259 para que en el 2017 entren en funcionamiento más fiscalías. Así, explicó que urge la apertura de 12 fiscalías municipales del MP en el interior del país, ya que actualmente se tiene cobertura del 10 por ciento en el área departamental. Para el buen funcionamiento de nuestro sistema de justicia, este debe contar con los recursos necesarios para cubrir todas las necesidades, no solo de la capital sino del área departamental, y contar con independencia para que así no exista interferencia de otros poderes.
Esperar que los políticos se mantengan incorruptibles y tengan éxito en el poder, es irrealista. O seguís las reglas del sistema corrupto o renunciás al cargo. La corrupción no solo se encuentra en el ámbito político, tenemos una sociedad corrompida y mientras que no cambiemos eso, no podremos hacer política transparente. Construir un mejor país no es tarea de la CICIG o el MP, es tarea de todos. Informémonos, exijamos, denunciemos y fiscalicemos. Un país justo no es utopía.
Entre los implicados destaca Ángel González, empresario mexicano y propietario de los canales 3,7, 11 y 13. González proporcionó hasta Q17,679,200 en fondos provenientes de Radiotelevisión Guatemala S.A., (Canal 3) y Televisiete S.A para el financiamiento de la campaña electoral del Partido Patriota. Ya en el poder, con la intención de devolverle el favor a González, el Partido Patriota, emitió contratos de pauta publicitaria por Q216.26 millones a las televisoras de Ángel González.
Al “ángel de la democracia” le han cortado las alas y la verdad acerca de sus medios de comunicación, los cuales se han encargado de manipular y censurar la información al pueblo, han salido a la luz. Considero que las empresas que se anuncian en esos medios, por el bien de la misma, deben retirar la publicidad; además, los periodistas de las televisoras de González deben asumir la responsabilidad de haber sido partícipes de la censura.
Faltan muchos delincuentes por ser capturados y esperamos que todo aquel que esté involucrado en actos de corrupción, sea procesado. Sin duda, hay muchas personas que no concilian el sueño. No solo el gabinete de Pérez Molina tiembla, todos los corruptos también tiemblan porque pronto les llegará la justicia. Mientras tanto seguirán disfrutando de sus helicópteros, carros, motocicletas, lanchas, terrenos, casas y fincas.
A diferencia de aquellos que ven la soberanía nacional como algo sagrado, considero que es necesario reconocer el gran trabajo que la CICIG ha realizado, ya que han actuado de manera más íntegra que el mismo estado nacional. Es importante exigir que los procesos se lleven a cabo de la manera correcta, siguiendo el debido proceso, para que así se haga justicia real y no solo se trate de calmar el hambre de venganza del pueblo. A pesar del buen desempeño que ha tenido la CICIG, debemos entender que la ayuda no puede ser eterna. Pronto llegará el momento de caminar solos y para eso debemos fortalecer nuestro sistema de justicia.
Recientemente, Thelma Aldana, solicitó al Ministerio de Finanzas Q1,791,710,259 para que en el 2017 entren en funcionamiento más fiscalías. Así, explicó que urge la apertura de 12 fiscalías municipales del MP en el interior del país, ya que actualmente se tiene cobertura del 10 por ciento en el área departamental. Para el buen funcionamiento de nuestro sistema de justicia, este debe contar con los recursos necesarios para cubrir todas las necesidades, no solo de la capital sino del área departamental, y contar con independencia para que así no exista interferencia de otros poderes.
Esperar que los políticos se mantengan incorruptibles y tengan éxito en el poder, es irrealista. O seguís las reglas del sistema corrupto o renunciás al cargo. La corrupción no solo se encuentra en el ámbito político, tenemos una sociedad corrompida y mientras que no cambiemos eso, no podremos hacer política transparente. Construir un mejor país no es tarea de la CICIG o el MP, es tarea de todos. Informémonos, exijamos, denunciemos y fiscalicemos. Un país justo no es utopía.